El miedo es una reacción de protección por parte del organismo que depende del desarrollo filogenético y también de la situación concreta en la que se produzca.
Hay varias maneras, en que se reacciona al miedo como:
-el ataque.
-la huida.
-la paralización o algunas conductas ínter sociales de sumisión frente a dominancia.
Veamos, citando a la misma autora, las diferencias entre, miedo, ansiedad, estrés y preocupación.
- miedo reacción de supervivencia del cuerpo ante una amenaza inmediata
- ansiedad reacción del organismo, a nivel cuerpo y mente, ante una amenaza, menos inmediata a la que la persona puede poner fin.
-estrés reacción continuada del organismo, ante una amenaza que sigue sin resolverse.
-preocupación igual a la ansiedad, pero el organismo no ejerce ninguna influencia, sobre ello.
Las cinco verdades sobre el miedo, según Susan Jeffers (1987)
1. El miedo nunca desaparecerá mientras, siga creciendo.
2. La única manera de liberarse del miedo a hacer algo es hacerlo.
3. La única manera de sentirme mejor es... enfrentarlo.
4. No soy único sintiendo miedo en terreno poco familiar, les pasa igual a todos los demás.
5. Vencer el miedo asusta menos que convivir con un miedo subyacente que proviene de la impotencia.
Estos postulados, vienen a resumir, las indicaciones anteriores que hemos hecho sobre el miedo, es decir, ante una situación o estímulo atemorizante hay que asumir una postura de autocrecimiento y aprendizaje ("de ésta situación saldré fortalecido y con más recursos").
La confianza de saber que es habitual sentir miedo ante situaciones imprevistas, novedosas. etc.
Tomar una decisión sea cual sea: puedo afrontarlo en ese momento (valoro la situación) o puedo darme tiempo para adquirir recursos nuevos para afrontarlo o simplemente puedo ignorarlo por un tiempo, hasta que se vuelva a presentar (aplazamiento) o puedo aceptarlo y asumirlo como una limitación elegida. (EJ: Miedo a los perros, lo asumo y acepto y cargo con las limitaciones que me impone), aún esta última situación si sentimos que es elección nuestra y que pudiendo resolverlo no lo hacemos, supone un grado de control sobre ese miedo.
El paciente cree generalmente que evita los acontecimientos (inclusive los humanos) en su medio ambiente.
Cuando descubre que en realidad huye de sus sentimientos (imaginados), como reacción ante dichos acontecimientos, se encuentra ya en condiciones de arriesgarse a una nueva experiencia. Talvez no pueda cambiar los acontecimientos externos. En cambio, sus sentimientos, si esta dispuesto, pueden ser distintos. Entonces se le presenta la ocasión de prescindir de la fuga, de conocer y aceptar lo que existe y de descubrir que sus sentimientos son, por lo menos, soportables.
El cliente debe llegar a saber cual es la distinción entre el temor (que probablemente suele decir que siente, aunque rara vez lo experimenta) y la ansiedad. Aunque las experiencia internas parezcan idénticas, los objetos del temor y la ansiedad son diferentes; uno existe y el otro es imaginario. El temor ocurre cuando hay una amenaza externa observable y presente en el mundo de uno (un automóvil que avanza a gran velocidad hacia nosotros, un incendio incontrolable); la ansiedad ocurre cuando producimos dentro dentro de nuestros sentimientos semejantes al temor y no existe ningún peligro externo.
¿CUANTAS COSAS PERDEMOS POR MIEDO A PERDER?